Oración de fin de año

Señor, al terminar este año quiero darte gracias por todo aquello que recibí de ti. Gracias por la vida y el amor, por las flores, el aire y el sol, por la alegría y el dolor por lo que fue posible y por lo que no pudo ser. Te ofrezco cuanto hice en este año: el trabajo que pude realizar y las cosas que pasaron por mis manos y lo que con ellas pude construir. Te presento las personas que a lo largo de estos meses ame, las amistades nuevas y los antiguos amores, los mas cercanos a mi y los que están mas lejos, los que me dieron la mano y aquellos a los que pude ayudar, con los que compartí la vida, el trabajo, el dolor y la alegría.

Pero también, Señor, hoy quiero pedir perdón por el tiempo perdido, por el dinero malgastado, por la palabra inútil y el amor desperdiciado. Perdón por las obras vacías, y el trabajo mal hecho, por vivir sin entusiasmo. Por la Oración que fui aplazando y que hasta ahora vengo a presentarte. Por todos mis olvidos, descuidos y silencios, nuevamente te pido perdón.
Autor: Padres Columbanos

Oración a Jesucristo por las familias de América

Juan Pablo II

Señor Jesucristo, te agradecemos
que el Evangelio del Amor del Padre,
con el que Tú viniste a salvar al mundo,
haya sido proclamado ampliamente en América
como don del Espíritu Santo
que hace florecer nuestra alegría.
Te damos gracias por la ofrenda de tu vida,
que nos entregaste amándonos hasta el extremo,
y nos hace hijos de Dios
y hermanos entre nosotros.
Aumenta, Señor, nuestra fe y amor a ti,
que estás presente
en tantos sagrarios del Continente.
Concédenos ser fieles testigos de tu Resurrección
ante las nuevas generaciones de América,
para que conociéndote te sigan
y encuentren en ti su paz y su alegría.
Sólo así podrán sentirse hermanos
de todos los hijos de Dios dispersos por el mundo.
Tú, que al hacerte hombre
quisiste ser miembro de una familia humana,
enseña a las familias
las virtudes que resplandecieron
en la casa de Nazaret.
Haz que permanezcan unidas,
como Tú y el Padre sois Uno,
y sean vivo testimonio de amor,
de justicia y solidaridad;
que sean escuela de respeto,
de perdón y mutua ayuda,
para que el mundo crea;
que sean fuente de vocaciones
al sacerdocio,
a la vida consagrada
y a las demás formas
de intenso compromiso cristiano.
Protege a tu Iglesia y al Sucesor de Pedro,
a quien Tú, Buen Pastor, has confiado
la misión de apacentar todo tu rebaño.
Haz que tu Iglesia florezca en América
y multiplique sus frutos de santidad.
Enséñanos a amar a tu Madre, María,
como la amaste Tú.
Danos fuerza para anunciar con valentía tu Palabra
en la tarea de la nueva evangelización,
para corroborar la esperanza en el mundo.
¡Nuestra Señora de Guadalupe, Madre de América,
ruega por nosotros!

Oración a la Virgen de la Almudena

Oh, Señora,
tú, que rompiste el muro de la Vida,
rompe ahora
mi muro de dolor, mi antigua herida.

Que yo sea almudí,
depósito del trigo celestial;
brille tu luz en mí,
la luz que de tus velas fue inmortal;

ciudadela,
que guarde la hornacina salvadora;
centinela
del bien, de tu legado, mi Señora.

Con bondad, con amor,
mira mis ruinas grises, desoladas.
Concédeme el favor
de hacerlas catedrales consagradas.

Credo Niceno-Constantinopolitano

"Creo en un solo Dios, 
Padre Todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra,
de todo lo visible y lo invisible.
Creo en un solo Señor, Jesucristo,
Hijo único de Dios, 
nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, 

Luz de Luz, 
Dios verdadero de Dios verdadero,
engendrado, no creado, 
de la misma naturaleza del Padre,
por quien todo fue hecho;
que por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación bajó del cielo, 
y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; 
y por nuestra causa fue crucificado
en tiempos de Poncio Pilato; 
padeció y fue sepultado,
y resucitó al tercer día, según las Escrituras,
y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos,
y su reino no tendrá fin.

Creo en el Espíritu Santo, 
Señor y dador de vida,
que procede del Padre y del Hijo,
que con el Padre y el Hijo recibe
una misma adoración y gloria,
y que habló por los profetas.

Creo en la Iglesia, que es una, 
santa, católica y apostólica.

Confieso que hay un solo Bautismo
para el perdón de los pecados.

Espero la resurrección de los muertos
y la vida del mundo futuro.
Amén."

Oración a San Juan Crisóstomo, patrono de los predicadores

¡Oh doctor insigne,
patrono de los predicadores del Evangelio!
Tú fuiste sal de la tierra y luz del mundo;
predicaste la palabra divina
oportuna e inoportunamente,
pide a Dios nos de pastores y doctores como tú.
Amén.

Oración a San Nicolás de Tolentino, abogado de las almas del purgatorios

¡Oh glorioso Taumaturgo
y Protector de las almas del purgatorio,
San Nicolás de Tolentino!
Con todo el afecto de mi alma
te ruego que interpongas
tu poderosa intercesión
en favor de esas almas benditas,
consiguiendo de la divina clemencia
la condonación de todos sus delitos y sus penas,
para que saliendo de aquella tenebrosa cárcel de dolores,
vayan a gozar en el cielo
de la visión beatífica de Dios.
Y a mí, tu devoto siervo,
alcánzame, ¡oh gran santo!,
la más viva compasión
y la más ardiente caridad
hacia aquellas almas queridas.
Amén.

Oración a San Pío de Pietrelcina

Oh Dios,
que a San Pío de Pietrelcina,
sacerdote capuchino,
le has concedido el insigne privilegio de participar,
de modo admirable,
de la pasión de tu Hijo:
concédeme, por su intercesión,
la gracia de...
que ardientemente deseo
y otórgame, sobre todo,
que yo me conforme
a la muerte de Jesús
para alcanzar después
la gloria de la resurrección.
Gloria al Padre... (3 veces)

Novena al Padre Pio de Pietrelcina

Oraciones para cada día.

1° Día 

Amadísimo Padre San Pío de Pietrelcina, tú que has llevado sobre tu cuerpo los estigmas de Nuestro Dios Jesucristo. Tú que también has llevado la Cruz por todos nosotros, soportando los sufrimientos físicos y morales que te flagelaron continuamente el alma y el cuerpo, en un doloroso martirio. Te rogamos, intercedas ante Dios Todopoderoso para que cada uno de nosotros sepa aceptar las pequeñas y grandes Cruces de la vida, transformando cada individual sufrimiento en un seguro vínculo que nos ata a la Vida Eterna. 

"Conviene acostumbrarse a los sufrimientos que Jesús os manda. Jesús que no puede soportar veros sufrir, vendrá a solicitaros y a confortaros, infundiendo nuevo ánimo en vuestro espíritu" Padre Pio

2° Día 

Santísimo Padre San Pio de Pietrelcina, tú que te encuentras cerca de nuestro amadísimo Padre Dios Jesucristo, y has tenido la santidad y resistencia en las tentaciones del maligno. Tú que has sido golpeado por los demonios del infierno que quisieron convencerte a abandonar tu camino de santidad. Ruega a Dios por nosotros, para que con tu ayuda y con la de Nuestro Señor, encontremos la fortaleza espiritual para renunciar al pecado y para conservar la fe hasta el día de nuestra muerte. 

"Ánimo y no temas la ira de Lucifer. Recordad siempre: qué es una buen señal cuando el enemigo se agita y ruge alrededor vuestro, ya que èsto demuestra que él no está dentro de tì". Padre Pio

3° Día

Virtuosísimo Padre San Pío de Pietrelcina, tú que has querido muchísimo a Nuestra Señora; y que cada día te concedió gracias y consuelos solamente por ELLA alcanzables. A la Virgen Santa, te suplicamos ruegues y pongas en Sus manos nuestros pecados y nuestras frías oraciones, para que como en Canà de Galilea, el Hijo le conceda a la Madre; y ya nuestro nombre será escrito en el Libro de la Vida. 

"María sea la estrella que os alumbre el camino, os enseñe la calle segura para ir al Padre Celestial; Ella sea el asidero firme que tengáis, para que os conservéis cada vez más unidos estrechamente en el tiempo de la prueba ". Padre Pio

4° Día

Castísimo Padre San Pío de Pietrelcina; que tanto amastes y nos enseñastes a amar al Santo Ángel de la Guarda; el que te sirvió de compañía, de guía, de defensor y de mensajero. A ti las Figuras Angélicas llevaron los ruegos de tus hijos espirituales. Intercede cerca de Dios para que también nosotros aprendamos a hablar con nuestro Ángel de la Guarda, para que en todo momento sepamos obedecerle, pues es la luz viva de Dios que nos evita la desgracia de caer en pecado. Nuestro Ángel siempre está listo a señalarnos el camino del bien y a disuadirnos de hacer el mal. 

"Invoca a tu Ángel de la Guarda, que te iluminará y te conducirá. Dios te lo ha dado por este motivo. Por tanto válete de él". Padre Pio


5° Día

Prudentísimo Padre San Pío de Pietrelcina. Tú que tanto amas y nos enseñastes a amar a las Almas del Purgatorio; por las que te has ofrecido como víctima que expió sus penas. Ruega a Dios Nuestro Señor, para que ponga en nuestros corazones sentimientos de compasión y amor por estas almas. También nosotros ayudaremos a las Almas del Purgatorio y reduciremos sus tiempos de destierro y de gran aflicción. Ganaremos para Ellas, con sacrificios y oración, el descanso eterno de sus almas; y las santas Indulgencias necesarias para sacarlas del lugar del sufrimiento.

"Oh Señor, Padre Jesucristo; te suplico viertas sobre mí, todos los castigos que son para los pecadores y las ánimas benditas del purgatorio; multiplica sobre mí los sufrimientos, conque conviertes y salvas a los pecadores, y lìbralos pronto del tormento del purgatorio ". Padre Pio

6° Día

Obedientísimo Padre San Pío de Pietrelcina. Tú, que has querido tanto a los enfermos; más que a tì mismo porque en ellos vistes a Jesús. Tú, que en el nombre de Dios has obrado Milagros de sanaciòn en el cuerpo, en el alma, y en la mente, en el presente, en el pasado y en el futuro de las personas; devolviendo esperanza de vida y renovación del espíritu, y en la integridad total de las personas. Ruega a Dios para que todos los enfermos; por intercesión de Maria Santísima, puedan experimentar tu potente ayuda y a través de la sanaciòn de su cuerpo encontrar beneficios espirituales y agradecer para siempre a Dios. 


"Si yo sé que una persona está afligida, sea en el alma o en el cuerpo, suplicaría a Dios para verla libre de sus males. De buena gana yo tomaría todos sus sufrimientos para verla salvada y cedería los frutos de tales sufrimientos en su favor". Padre Pio

7° Día

Benditìsimo Padre San Pio de Pietrelcina. Tú que has realizado el proyecto de salvación de Dios y has ofrecido tus sufrimientos para desatar a los pecadores de las riendas de Satanás. Ruega a Dios para que los hombres, que no creen, tengan una gran y verdadera fe y se conviertan; arrepintiéndose en lo profundo de su corazón; y que las personas con poca fe mejoren su vida cristiana; y que los hombres justos continúen sobre el camino de la salvación. 

"Si el pobre mundo pudiera ver la belleza del alma sin pecado, todos los pecadores, todos los incrédulos se convertirían al instante. " Padre Pio

8° Día

Purísimo Padre San Pío de Pietrelcina, Tú que has querido mucho a tus hijos espirituales. Muchos de tus hijos han sido comprados por ti con el precio de tu sangre. También nos concedes a los que no te hemos conocido personalmente, de considerarnos como tus hijos espirituales. Con tu paternal protección, con tu santa guía y con la fortaleza que conseguirás para nosotros de Dios, podremos, en el momento de la muerte, encontrarte en las puertas del Paraíso, en espera de nuestra llegada. 

"Si me fuera posible, querría conseguir de Dios solamente una cosa;"si me dijera: "Vas al Paraíso" querría conseguir esta gracia: "Señor, no me dejéis ir al Paraíso hasta que el ultimo de mis hijos; la última de las personas que me han sido confiadas, haya entrado antes que Yo." Padre Pio


9° Día

Humildísimo Padre San Pío de Pietrelcina, Tú que has verdaderamente amado a la Santa Madre Iglesia. Ruega a Dios, nuestro Señor, al Señor de la Mies para que mande obreros a Su Mies, y regalos a cada uno de ellos; de manera que llenando el mundo de sacerdotes santos; obtengan la fuerza y la inspiración de Dios. Además te rogamos interceder ante la Santísima Siempre Virgen María; para que conduzcas a todos los hombres hacia la unidad de los cristianos, reuniéndolos en la gran casa de Dios; para que la Iglesia sea el faro de luz y salvación en el mar de tempestad que es la vida. 

"Siempre mantente unido a la Santa Iglesia Católica, porque sólo ella puede salvarte, porque sólo ella posee a Jesús Sacramentado, que es el verdadero príncipe de la paz. Fuera de la Iglesia Católica, no hay salvación, ella te da el bautismo, el perdón de los pecados, el Cuerpo, la sangre, el Alma, y la Divinidad de Jesucristo, concediéndote por tanto la vida eterna; y todos los santos sacramentos para llevar una vida de santidad." Padre Pío.

¡No te Confieses!

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Vídeo: El derecho de nacer

Oración para comenzar a estudiar

Oh inefable Creador nuestro,
altísimo principio y fuente verdadera de luz y sabiduría,
dígnate infundir el rayo de tu claridad sobre las tinieblas de mi inteligencia,
removiendo la doble oscuridad con la que nací: la del pecado y la ignorancia!
¡Tú, que haces elocuentes las lenguas de los pequeños, instruye la mía, e infunde en mis labios la gracia de tu bendición!
Dame agudeza para entender,
capacidad para retener,
método y facilidad para atender,
sutileza para interpretar
y gracia abundante para hablar.
Dame acierto al empezar,
dirección al progresar
y perfección al acabar
¡Oh Señor! Dios y hombre verdadero, que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén.

Autor: Santo Tomas de Aquino

Oración al iniciar el estudio

Padre Providente,
que eres llamado fuente
De la luz y de la sabiduría:
ilumina mi entendimiento
Y disipa las tinieblas en que he nacido,
y también la ignorancia.
Concédeme la facultad de aprender,
La facilidad para entender,
La capacidad para retener,
la sutileza para interpretar
y el don de saber hablar.
Que así sea.

Oración del Estudiante

Oh María, Madre mía,
Trono de la Sabiduría Eterna...
Alcánzame la gracia:
De estudiar con aplicación,
De aprender con facilidad
Y de retener con firmeza y seguridad,
Para la Gloria de Dios
Y salvación de mi alma...

Amén

EL ROSARIO DE LA ARMADA DE NUESTRA SEÑORA

Lo que estamos viviendo hoy en día es una batalla espiritual; es por esta razón que debemos revestirnos con las armas de Dios para proteger nuestra alma y nuestro cuerpo.

Esta oración puede ser rezada en grupo, por el coordinador del grupo, en voz alta. La oración está basada en la carta de San Pablo a los Efesios, Capitulo 6, versículos del 10-18. 

LAS ARMAS DE DIOS.

“Por lo demás, fortalézcanse en el Señor y en la fuerza poderosa. Revístanse de las armas de Dios para poder resistir a las acechanzas del diablo. Porque nuestra lucha no es contra la carne y la sangre, sino contra los principados, contra las potestades, contra los dominadores de este mundo tenebroso, contra los espíritus del mal que están en el aire. Por eso, tomen las armas de Dios, para que puedan resistir en el día funesto, y manténganse firmes después de haber vencido todo. Pónganse en pie, ceñida su cintura con la verdad y revestidos de la justicia como coraza, calzados los pies con el celo por el Evangelio de la paz, abrazando siempre el escudo de la fe, para que puedan apagar con él todos los encendidos dardos del maligno. Tomen, también, el casco de la salvación y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios. No dejen ustedes de orar: rueguen y pidan a Dios siempre, guiados por el Espíritu. Manténganse alerta, sin desanimarse, y oren por todo el pueblo santo”.

Padre en tus manos encomiendo mi espíritu, alma y cuerpo, te lo pido en el nombre de tu hijo Jesús. Amén.

ORACIONES DE LA ARMADA. 

Estas oraciones no se pueden sustituir por otras que se les parezcan o alterar el orden en que están dadas. De esta manera todos los grupos de la Armada estarán unidos espiritualmente en un mismo corazón a través de la Santísima Virgen.

I. ROSARIO DE LA SANTÍSIMA VIRGEN (Misterios Gozosos, luminosos, dolorosos, o gloriosos)
II. ORACIÓN DEL OFRECIMIENTO DE VIDA.
III. LETANÍA A DIOS PADRE.
IV. LETANÍA DE LA PRECIOSÍSIMA SANGRE DE JESUCRISTO.
V. LETANÍA A LA SANTÍSIMA VIRGEN.
VI. CONSAGRACIÓN A LA PRECIOSÍSIMA SANGRE DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO.
VII. ROSARIO DE LOS SIETE DOLORES DE LA SANTÍSIMA VIRGEN.

“Todas las personas que pertenezcan a la Armada son naturalmente personas que aman a Dios, son personas que le brindan su tiempo a Dios. Dentro de los próximos seis meses quisiera que se formaran los grupos para que todos los remos estén en total unión con la Armada”.

Mensaje de Nuestra Señora de la Preciosísima Sangre al Hermano Thomas Smith.8 de Julio de 2009- Washington, LA

“Quiero que mis hijos se unan a rezar el Rosario, con el propósito de formar el rosario de la Armada, para convertir sacerdotes y para que sean portadores de salvación y conversión para el resto de esta nación. Estos grupos al rezar estas oraciones, recibirán muchas gracias y al mismo tiempo podrán ayudar a los demás; esto es una gran bendición. La Armada es una flota de barcos… Almas que me invocan a mí y a Dios Padre para ayudar a la salvación de la humanidad. Esto no solamente es para el resto del país, sino para los que participen en estos grupos. Muchos milagros les serán dados.

Mensaje de Nuestra Señora de la Preciosísima Sangre al Hermano Thomas Smith.25 de Julio, 2009 Denham Springs, Los Ángeles.

Gracias por haber escuchado mi llamado.

I.  EL ROSARIO

LOS MISTERIOS GOZOSOS (se rezan los lunes, sábados y domingos de Adviento y los domingos desde la Epifanía hasta la Cuaresma.)

1. La anunciación.
2. La visitación
3. El nacimiento del Niño Jesús.
4. La presentación en el templo.
5. El niño Jesús perdido y hallado en el templo.

LOS MISTERIOS LUMINOSOS (se rezan todos los jueves)

1. El bautismo de Nuestro Señor Jesucristo
2. Las bodas de Cana.
3. La proclamación del Reino de Dios.
4. La transfiguración de Nuestro Señor Jesucristo.
5. La institución de la Eucaristía.

LOS MISTERIOS DOLOROSOS (se rezan los martes y viernes y diariamente desde el miércoles de ceniza hasta el sábado de gloria.)

1. La agonía del Señor en el Huerto de Getsemaní.
2. La flagelación de Jesús, atado a la columna.
3. La coronación de espinas.
4. Nuestro Señor carga su cruz.
5. La crucifixión y muerte de nuestro Señor Jesucristo.

LOS MISTERIOS GLORIOSOS (se rezan los miércoles y domingos el resto del año)

1. La resurrección.
2. La ascensión del Señor al cielo.
3. La venida del Espíritu Santo sobre los Apóstoles.
4. La asunción de la Virgen María a los cielos.
5. La coronación de María Santísima como Reina del cielo y Tierra.

II ORACIÓN DEL OFRECIMIENTO DE VIDA

“Mi amable Jesús, delante de las personas de la Santísima Trinidad, delante de Nuestra Madre del Cielo, y toda la Corte celestial, ofrezco, según las instrucciones de tu Corazón Eucarístico y las del Inmaculado Corazón de María Santísima, toda mi vida, todas mis santas Misas, Comuniones, buenas obras, sacrificios y sufrimientos, uniéndolos a los meritos de tu Santísima Sangre y tu muerte de cruz: para adorar a la Gloriosa Santísima Trinidad, para ofrecerle reparación por nuestras ofensas, por la unión de nuestra santa Madre Iglesia, por nuestros sacerdotes, por las buenas vocaciones sacerdotales y por todas las almas hasta el fin del mundo.
Recibe, Jesús mío, mi ofrecimiento de vida y concédeme gracia para perseverar en el fielmente hasta el fin de mi vida. Amén.”

III LETANÍA A DIOS PADRE

Oh Dios, Padre del Cielo, ten piedad de nosotros
Oh Dios, Hijo, redentor del mundo ten piedad de nosotros
Oh Dios, Espíritu Santo ten piedad de nosotros
Santísima Trinidad que eres un solo Dios ten piedad de nosotros
Padre creador del mundo ten piedad de nosotros
Padre reconciliador del mundo ten piedad de nosotros
Padre sabiduría eterna ten piedad de nosotros
Padre bondad infinita ten piedad de nosotros
Padre providencia inefable ten piedad de nosotros
Padre fuente de cada cosa ten piedad de nosotros
Padre dulcísimo ten piedad de nosotros
Padre de infinita misericordia ten piedad de nosotros
Padre defensor nuestro ten piedad de nosotros
Padre gozo y gloria nuestra ten piedad de nosotros
Padre rico con toda la creación ten piedad de nosotros
Padre triunfo de las naciones ten piedad de nosotros
Padre esperanza de los cristianos ten piedad de nosotros
Padre grandeza de la Iglesia ten piedad de nosotros
Padre esplendor de reyes ten piedad de nosotros
Padre trastorno de los ídolos ten piedad de nosotros
Padre consolador de los pueblos ten piedad de nosotros
Padre gozo de los sacerdotes ten piedad de nosotros
Padre guía de los hombres ten piedad de nosotros
Padre don de la vida familiar ten piedad de nosotros
Padre ayuda de los pobres ten piedad de nosotros
Padre guía de los jóvenes ten piedad de nosotros
Padre amigo de los pequeños ten piedad de nosotros
Padre libertad de los esclavos ten piedad de nosotros
Padre luz de los que están en tinieblas ten piedad de nosotros
Padre destructor de los orgullosos ten piedad de nosotros
Padre sabiduría de los justos ten piedad de nosotros
Padre reposo en la tribulación ten piedad de nosotros
Padre esperanza en la desolación ten piedad de nosotros
Padre puerto de salvación en los peligros ten piedad de nosotros
Padre consolador de los pobres ten piedad de nosotros
Padre consolador de los afligidos ten piedad de nosotros
Padre refugio de los desesperanzados ten piedad de nosotros
Padre refugio de los huérfanos ten piedad de nosotros
Padre refugio de los moribundos ten piedad de nosotros
Padre que apagas nuestra sed y pobreza ten piedad de nosotros
Padre vida de los muertos ten piedad de nosotros
Padre gloria de los santos ten piedad de nosotros 

Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo. Perdónanos Señor.
Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo. Escúchanos Señor.
Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo. Ten piedad de nosotros.

Oremos,

Padre, el mundo te necesita, todo hombre te necesita, el aire pesado y contaminado te necesitan, te rogamos querido Padre vuelve a caminar por las calles del mundo, vuelve a vivir entre tu gente, vuelve a guiar las naciones, vuelve a traer la paz y con ella la justicia, vuelve a traer el fuego de tu amor, para que así redimidos por nuestras tristezas podamos ser criaturas nuevas. Amén.

IV LETANÍA DE LA PRECIOSA SANGRE DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO.

Señor, ten piedad de nosotros. Señor, ten piedad de nosotros.
Cristo, ten piedad de nosotros. Cristo, ten piedad de nosotros.
Señor, ten piedad de nosotros. Señor, ten piedad de nosotros.
Cristo, escúchanos. Cristo, escúchanos con bondad. 
Dios, Padre Celestial. Ten piedad de nosotros. 
Dios, Hijo, Redentor del mundo. Ten piedad de nosotros.
Dios, Espíritu Santo. Ten piedad de nosotros.
Santísima Trinidad, un solo Dios. Ten piedad de nosotros.

L: Oh Preciosísima Sangre de Jesucristo, Sangre de Salvación.
R: Cúbrenos a nosotros y al mundo entero.

Océano de la Sangre de Jesucristo, libéranos.
Sangre de Jesucristo, llena de santidad y compasión, libéranos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, nuestra fuerza y poder, libéranos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Alianza Eterna, libéranos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Fundamento de la Fe Cristiana, libéranos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Armadura de Dios, libéranos. 
Preciosa Sangre de Jesucristo, Caridad Divina, libéranos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Flagelo de los demonios, libéranos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Ayuda de los Cautivos, libéranos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Vino Sagrado, libéranos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Poder de los Cristianos, libéranos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Defensora de la Muralla Católica, libéranos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Verdadera Fe de los Cristianos, libéranos. 
Preciosa Sangre de Jesucristo, Sangre Sanadora, sálvanos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Sangre de Unción, sálvanos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Fortaleza de los Hijos de Dios, sálvanos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Capitana de los Guerreros Cristianos, sálvanos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Sangre de Resurrección, sálvanos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Bebida de los Ángeles Celestiales, sálvanos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Consolación de Dios Padre, sálvanos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Poder del Espíritu Santo, sálvanos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Circuncisión de los Gentiles, sálvanos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Paz del Mundo, sálvanos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Luz del Cielo y de la Tierra, sálvanos. 
Preciosa Sangre de Jesucristo, Arco Iris del Cielo, sálvanos. 
Preciosa Sangre de Jesucristo, Esperanza de los Niños Inocentes, sálvanos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Palabra de Dios en nuestros corazones, sálvanos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Arma Celestial, sálvanos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Sabiduría Divina, sálvanos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Fundamento del mundo, sálvanos.
Preciosa Sangre de Jesucristo, Misericordia de Dios Padre, sálvanos.

L: Oh Preciosísima Sangre de Jesucristo,
R: Limpia los pecados del mundo.
L: Oh Preciosísima Sangre de Jesucristo,
R: Purifica al mundo.
L: Oh Preciosísima Sangre de Jesucristo,
R: Enséñanos cómo consolar a Jesús.

Oremos
Oh Preciosísima Sangre de nuestra salvación, creemos, esperamos y confiamos en ti. Libera a todos aquellos que están en manos de los espíritus infernales, te rogamos. Protege a los moribundos de toda obra de los espíritus malignos y dales la bienvenida a Tu eterna gloria. Ten misericordia del mundo entero y fortalécenos para adorar y consolar al Sagrado Corazón. Te adoramos, Oh Preciosa Sangre de Misericordia. Amén.

L: Oh Preciosísima Sangre de Jesucristo.
R: Sana las heridas del Sacratísimo Corazón de Jesús.

Se repite 3 veces.

V LETANÍA DE LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA.

Señor, ten piedad. Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad. Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad. Señor, ten piedad
Cristo, escúchanos Cristo, escúchanos con bondad
Dios, Padre del Cielo Ten piedad de nosotros
Dios Hijo, Redentor del mundo Ten piedad de nosotros
Dios, Espíritu Santo Ten piedad de nosotros
Santísima Trinidad, un solo Dios Ten piedad de nosotros
Santa María Ruega por nosotros
Santa Madre de Dios Ruega por nosotros
Santa Virgen de las vírgenes Ruega por nosotros
Madre de Cristo Ruega por nosotros
Madre de la Divina Gracia Ruega por nosotros
Madre de la Iglesia Ruega por nosotros
Madre Purísima Ruega por nosotros
Madre Castísima Ruega por nosotros
Madre Siempre Virgen Ruega por nosotros
Madre Inmaculada Ruega por nosotros
Madre Amable Ruega por nosotros
Madre Admirable Ruega por nosotros
Madre del Buen Consejo Ruega por nosotros
Madre del Creador Ruega por nosotros
Madre del Salvador Ruega por nosotros
Virgen Prudentísima Ruega por nosotros
Virgen Digna de Veneración Ruega por nosotros
Virgen Digna de Alabanza Ruega por nosotros
Virgen Poderosa Ruega por nosotros
Virgen Clemente Ruega por nosotros
Virgen Fiel Ruega por nosotros
Espejo de Justicia Ruega por nosotros
Trono de Sabiduría Ruega por nosotros
Causa de Nuestra Alegría Ruega por nosotros
Vaso Espiritual Ruega por nosotros
Vaso Digno de Honor Ruega por nosotros
Vaso Insigne de Devoción Ruega por nosotros
Rosa Mística Ruega por nosotros
Torre de David Ruega por nosotros
Torre de Marfil Ruega por nosotros
Casa de Oro Ruega por nosotros
Arca de la Alianza Ruega por nosotros
Puerta del Cielo Ruega por nosotros
Estrella de la Mañana Ruega por nosotros
Salud de los Enfermos Ruega por nosotros
Refugio de los Pecadores Ruega por nosotros
Consoladora de los Afligidos Ruega por nosotros
Auxilio de los Cristianos Ruega por nosotros
Reina de los Ángeles Ruega por nosotros
Reina de los Patriarcas Ruega por nosotros
Reina de los Profetas Ruega por nosotros
Reina de los Apóstoles Ruega por nosotros
Reina de los Mártires Ruega por nosotros
Reina de los Confesores Ruega por nosotros
Reina de las Vírgenes Ruega por nosotros
Reina de todos los Santos Ruega por nosotros
Reina Concebida Sin Pecado Original Ruega por nosotros
Reina Asunta al Cielo Ruega por nosotros
Reina del Santísimo Rosario Ruega por nosotros
Reina de la Paz Ruega por nosotros

L: Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,
R: Perdónanos, Señor. 
L: Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,
R: Escúchanos, Señor.
L: Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,
R: Ten piedad de nosotros.
L: Ruega por nosotros Santa Madre de Dios
R: Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo. Amén

Oremos
Te rogamos nos concedas, Señor Dios nuestro, gozar de continua salud de alma y cuerpo, y por la gloriosa intercesión de la bienaventurada siempre Virgen María, vernos libres de las tristezas de la vida presente y disfrutar de las eternas alegrías. Por Cristo nuestro Señor. Amén. 

L: Que el auxilio divino permanezca siempre con nosotros.
R: Y que por la Misericordia de Dios, las almas de todos los fieles difuntos descansen en paz. Amén

VI CONSAGRACIÓN A LA SANGRE PRECIOSA DE JESUCRISTO

Consciente de mi nada y de tu Sublimidad, Misericordioso Salvador, me postro a Tus pies, y Te agradezco por las innumerables pruebas de tu Gracia que te has dignado derramar en tan ingrata criatura. En especial te doy gracias por haberme liberado por Tu Preciosa Sangre del poder destructivo de Satanás. 

En presencia de mi querida Madre María, mi ángel guardián, mi santo patrono y de todas las huestes celestiales, me consagro voluntariamente y de todo corazón, oh querido Jesús, a Tu Preciosa Sangre con la que redimiste al mundo del pecado, de la muerte y del infierno. 

Te prometo, con la ayuda de Tu gracia y con todas mis fuerzas, suscitar y promover la devoción a Tu Preciosa Sangre, que es el precio de nuestra redención, para que Tu adorable Sangre sea honrada y glorificada por todos. De esta forma quiero reparar mi deslealtad a Tu Preciosa Sangre de amor y ofrecerte satisfacción por las muchas profanaciones que los hombres cometen contra el inestimable precio de su salvación. 

Que mis propios pecados, mi frialdad y todos los actos irrespetuosos que haya cometido en el pasado contra Ti, oh Sangre Santa y Preciosa, queden borrados. Mira, oh querido Jesús, te ofrezco el Amor, el Honor y la Adoración que tu Santísima Madre, Tus fieles discípulos y todos los santos han ofrecido a Tu Preciosa Sangre. 

Te pido olvidar mi anterior falta de fe y frialdad y te pido que perdones a todos los que te hayan ofendido. Báñame, oh Divino Salvador, y a todos los hombres, con Tu Preciosa Sangre, para que podamos, oh Amor Crucificado, amarte de ahora en adelante con todo nuestro Corazón y que honremos dignamente el precio de nuestra Salvación. Amén.

VII ROSARIO DE LOS SIETE DOLORES DE NUESTRA SANTÍSIMA MADRE.

Esta devoción se origino en el siglo XIII. Representa los siete dolores que sufrió nuestra Santísima Madre por su hijo Jesús. El rosario consiste en rezar un Padre Nuestro y siete Avemarías meditando cada dolor sufrido por la Virgen. Al final se rezan tres avemarías en honor a las lágrimas derramadas por Nuestra Santísima Madre.

1. La profecía de Simeón. “Una espada de dolor atravesara tu corazón”
2. La huida a Egipto. Escapando de la persecución de Herodes que quería matar a su Hijo amado.
3. El niño perdido y hallado en el templo.
4. Jesús y María se encuentran en el camino al Calvario.
5. Jesús muere en la cruz.
6. Jesús es bajado de la cruz y depositado en sus brazos.
7. Cuando contempló el cuerpo de su Divino Hijo acostado en el sepulcro.

Oración a San Agustín

Oración compuesta por Juan Pablo II

¡Oh gran Agustín,
nuestro padre y maestro!,
conocedor de los luminosos caminos de Dios,
y también de las tortuosas
sendas de los hombres,
admiramos las maravillas que la gracia divina
obró en ti, convirtiéndote en testigo apasionado
de la verdad y del bien,
al servicio de los hermanos.

Al inicio de un nuevo milenio,
marcado por la cruz de Cristo,
enséñanos a leer la historia
a la luz de la Providencia divina,
que guía los acontecimientos
hacia el encuentro definitivo con el Padre.

Oriéntanos hacia metas de paz,
alimentando en nuestro corazón
tu mismo anhelo por aquellos valores
sobre los que es posible construir,
con la fuerza que viene de Dios,
la "ciudad" a medida del hombre.

La profunda doctrina
que con estudio amoroso y paciente
sacaste de los manantiales
siempre vivos de la Escritura
ilumine a los que hoy sufren la tentación
de espejismos alienantes.

Obtén para ellos la valentía
de emprender el camino
hacia el "hombre interior",
en el que los espera
el único que puede dar paz
a nuestro corazón inquieto.

Muchos de nuestros contemporáneos
parecen haber perdido
la esperanza de poder encontrar,
entre las numerosas ideologías opuestas,
la verdad, de la que, a pesar de todo,
sienten una profunda nostalgia
en lo más íntimo de su ser.

Enséñales a no dejar nunca de buscarla
con la certeza de que, al final,
su esfuerzo obtendrá como premio
el encuentro, que los saciará,
con la Verdad suprema,
fuente de toda verdad creada.

Por último, ¡oh san Agustín!,
transmítenos también a nosotros una chispa
de aquel ardiente amor a la Iglesia,
la Catholica madre de los santos,
que sostuvo y animó
los trabajos de tu largo ministerio.

Haz que, caminando juntos
bajo la guía de los pastores legítimos,
lleguemos a la gloria de la patria celestial
donde, con todos los bienaventurados,
podremos unirnos al cántico nuevo
del aleluya sin fin. Amén.

Puedes leer la Vida de San Agustín AQUÍ

Oración a la Virgen de los Treinta y Tres

“Santísima Virgen María, ante cuya imagen
inclinaron su bandera y doblaron
reverentes su rodilla
los fundadores de nuestra Patria
Protege siempre a este pueblo
nacido a tu sombra bienhechora.
Haz ¡Oh Madre!
que en nuestros hogares florezcan la religión y
todas las virtudes cristianas.
Haz que veamos el reinado de Cristo,
que es el de la verdad y la justicia.
Alcánzanos estas gracias y la de la eterna salvación,
de tu hijo Jesucristo que con el Padre y el Espíritu Santo
vive y reina por los siglos
de los siglos.

Oración a la Virgen Asunta

Dios todopoderoso y eterno,
que has elevado en cuerpo y alma a los cielos
a la inmaculada Virgen María,
Madre de tu Hijo,
concédenos, te rogamos,
que aspirando siempre a las realidades divinas
lleguemos a participar con ella de su misma gloria en el cielo.
Por Jesucristo nuestro Señor. Amén

Oración a San Maximiliano María Kolbe

Señor Dios,
que al mártir san Maximiliano María Kolbe,
apóstol de la Inmaculada,
lo llenaste de celo por las almas y de amor al prójimo,
concédenos, por su intercesión,
trabajar generosamente por tu gloria
en el servicio de los hombres
y tener el valor de asemejarnos a tu Hijo,
incluso hasta en la muerte.
Por Jesucristo muestro Señor. Amén.

Oración a nuestra Señora del Pilar

Oh Virgen del Pilar, Reina y Madre, España y todas las naciones hispanas reconocen con gratitud tu protección constante y esperan seguir contando con ella.

Obténnos de tu Hijo fortaleza en la fe, seguridad en la esperanza y constancia en el amor.

Queremos que en todos los instantes de nuestra vida sintamos que tu eres nuestra Madre.

Por Jesucristo nuestro Señor.

Amén.

Oración a la Virgen de Covadonga

ORACIÓN DEL PAPA JUAN PABLO II A LA VIRGEN DE COVADONGA

21 de Agosto 1989

Dios te salve, Reina y Madre de misericordia,
he subido a la montaña, he venido a tu cueva, Virgen María, para venerar tu imagen, Santina de Covadonga.

Con tus hijos de Asturias y de España entera
quiero hoy proclamar tus glorias y unirme a tu canto:
tú eres la sierva del Señor, nuestra Madre y Reina.

Como peregrino que ansía afianzar su esperanza,
vengo a este santuario, testigo de tanta fe y amor en la Historia, hogar seguro, bajo tu cobijo, entre los montes, donde pusiste tu casa y sin cesar dispensas los dones de tu Hijo.

Junto con los pastores y fieles de esta Iglesia de Asturias, a ti, que eres dulzura y esperanza de cuantos te imploran, te pido el don de la esperanza que ilumina el futuro, el gozo perenne de la fe, el ardor ardiente (le la caridad.

Ayúdanos a vivir en comunión sincera, sabiéndonos Iglesia de Dios, hermanos de Cristo e hijos tuyos,
para dar testimonio de unidad y reavivar en nuestro pueblo la fe.

Te pido, Señora, desde este corazón de Asturias que es tu cueva, por todos los que invocan tu nombre en tantos otros templos que, esparcidos en la geografía del Principado, son faros de fe, santuarios donde brota el fervor de la esperanza, morada tuya donde tus hijos se reúnen en torno al altar.

Quiero presentarte y poner ante tus pies, Virgen de Covadonga, a todos tus hijos de Asturias,
las gentes del campo y los hombres del mar,
los mineros con su duro e inclemente trabajo,
los niños y los ancianos, los enfermos y todos los que sufren en el cuerpo y en el alma, las familias y, sobre todos, los jóvenes, promesa del futuro,
que buscan la razón y el sentido de su vivir.

Alcanza para todos de Dios, «rico en misericordia»,
con tu poderosa mediación maternal,
la gracia del perdón y de la reconciliación
que Cristo tu Hijo nos ha merecido
para vivir en paz con Dios y con los hermanos.

Protege, Virgen Santa de Covadonga,
a cuantos vienen hasta tu templo
para unirse en matrimonio bajo tu mirada maternal.
Haz que experimenten, como los esposos de Caná,
la gracia de tu intercesión y la presencia salvadora de tu Hijo, para que la fe cristiana sea fundamento inquebrantable de su hogar, y el amor verdadero fortalezca su unión y se abra fecundo a la vida.

Mira, madre de Asturias, a todos los emigrantes de esta tierra que desde lejos vuelven sus ojos hasta este santuario, en espera de poder regresar a su patria y contemplar tu rostro, que atrae los corazones e irradia luz y paz.

«Santina de Covadonga», «causa de nuestra alegría»,
ilumina a cuantos llegan a estas montañas para que reconozcan, en medio de tanta belleza, a quien «yéndolas mirando, con sola su figura, vestidas las dejó de su hermosura», y así se dejen atraer por la bondad y belleza del Creador que hizo de ti el vértice de la hermosura humana y divina.

Suscita, madre de Asturias, entre los hijos e hijas de las familias cristianas, vocaciones de apóstoles y misioneros: nuevos sacerdotes, religiosos y religiosas,
personas consagradas y seglares comprometidos,
al servicio del reino y de la civilización del amor.

Haz que, hoy como ayer, los hijos de Asturias sigan a tu Hijo por el camino de la santidad. y siembren la semilla del Evangelio desde aquí hasta los confines de la Tierra.

Madre y maestra de la fe católica, haz que Covadonga siga siendo, como antaño lo fue, altar mayor y latido del corazón de España.

Y a quienes te cantamos como "la reina de nuestra montaña", y a todos los hermanos que peregrinan por los senderos de la fe, muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre, que nos ofreces siempre como salvador y hermano nuestro.
Oh clementísima, oh piadosa, oh dulce Virgen María. Amén.

Vida de Tony Meléndez

Cuando sientas que no puedes mas, piensa en esto, por que nada es imposible, ¡tienes el potencial para todo!. Aprende a seguir

Oración Oficial de la Jornada Mundial de la Juventud

¡Oh Padre! enviaste a Tu Hijo Eterno para salvar al mundo y elegiste hombres y mujeres para que, por Él, con Él y en Él proclamaran la Buena Noticia a todas las naciones. Concede las gracias necesarias para que brille en el rostro de todos los jóvenes la alegría de ser, por la fuerza del Espíritu, los evangelizadores que la Iglesia necesita en el Tercer Milenio.

¡Oh Cristo! Redentor de la humanidad, Tu imagen de brazos abiertos en la cumbre del Corcovado acoge a todos los pueblos. En Tu ofrecimiento pascual, nos condujiste por medio del Espíritu Santo al encuentro filial con el Padre. Los jóvenes, que se alimentan de la Eucaristía, Te oyen en la Palabra y Te encuentran en el hermano, necesitan Tu infinita misericordia para recorrer los caminos del mundo como discípulos misioneros de la nueva evangelización.

¡Oh Espíritu Santo! Amor del Padre y del Hijo, con el esplendor de Tu Verdad y con el fuego de Tu amor, envía Tu Luz sobre todos los jóvenes para que, impulsados por la Jornada Mundial de la Juventud, lleven a los cuatros rincones del mundo la fe, la esperanza y la caridad, convirtiéndose en grandes constructores de la cultura de la vida y de la paz y los protagonistas de un nuevo mundo.

¡Amén!

Oración a la Virgen del Carmen de "La Tirana"

Dios misericordioso:
Al reunirnos para honrar a nuestra madre,
bajo su advocación de Virgen del Carmen
de La Tirana, venimos con fe y esperanza
a pedirte salud y salvación.

Madre del Carmelo, Virgen de La Tirana,
que la pasión de Cristo nos hermane y
nos ayude a servir con alegría

Ruega por nosotros pecadores,
para que el Señor resucitado
viva en nuestros corazones

Enséñanos a imitar tu propia vida;
a creer fielmente en la palabra de Jesús y
a ponerla en práctica, sin temor.

Une a todos tus hijos que te buscan,
en el único pueblo de Dios que peregrina
hacia la patria del cielo.

Que contigo construyamos
un mundo de paz
en la justicia

Que el Espíritu santo nos guíe,
y en la hora de muerte nos reciba
en la casa del Padre bondadoso.
Amén.
Fuente: www.iglesia.cl/

Consagración a la Virgen del Carmen

"!Oh, María, Reina y Madre del Carmelo!
Vengo hoy a consagrarme a Ti,
pues toda mi vida es como un pequeño tributo
por tantas gracias y beneficios
como he recibido de Dios a través de tus manos.

Y porque Tú miras
con ojos de particular benevolencia
a los que visten tu escapulario,
te ruego que sostengas con tu fortaleza mi fragilidad,
ilumines con tu sabiduría las tinieblas de mi mente
y aumentes en mi la fe, la esperanza y la caridad,
para que cada día pueda rendirle
el tributo de mi humilde homenaje.

El santo escapulario atraiga sobre mí
tus miradas misericordiosas,
sea para mí prenda de tu particular protección
en luchas de cada día y constantemente me recuerdes
el deber de pensar en Ti y revestirme de tus virtudes.

De hoy en adelante me esforzaré
por vivir en suave unión con tu espíritu,
ofrecerlo todo a Jesús por tu medio
y convertir mi vida en imagen de tu humildad,
caridad, paciencia, mansedumbre y espíritu de oración.

¡Oh, Madre amabilísima!
Sosténme con tu amor indefectible,
a fin de que a mí, pecador indigno,
me sea concedido un día cambiar tu escapulario
por el eterno vestido nupcial y habitar contigo
y con los santos del Carmelo en el reino de tu Hijo".
Amén.

Acción de gracias y ofrecimiento a la Virgen del Carmen

¡Oh Virgen Santa del Carmen!
Jamás podremos corresponder dignamente
a los favores y gracias que nos has hecho al darnos tu santo Escapulario.
Acepta nuestro sencillo, pero hondamente sentido,
agradecimiento y,
ya que nada te podemos dar que sea digno de Ti
y de tus mercedes, ofrecemos nuestro corazón,
con todo su amor, y toda nuestra vida,
que queremos emplear en el amor
y servicio de tu Hijo Señor nuestro,
y en propagar tu dulce devoción,
procurando que todos nuestros hermanos en la fe,
con los cuales la divina Providencia
nos hace convivir y relacionar,
estimen y agradezcan tu gran don,
vistiendo el santo Escapulario,
y que todos podamos vivir y morir en tu amor y devoción.
Amén

Súplica a la Virgen del Carmen en tiempos difíciles

"Tengo mil dificultades: ayúdame.
De los enemigos del alma: sálvame.
En mis desaciertos: ilumíname.
En mis dudas y penas: confórtame.
En mis enfermedades: fortaléceme.
Cuando me desprecien: anímame.
En las tentaciones: defiéndeme.
En horas difíciles: consuélame.
Con tu corazón maternal: ámame.
Con tu inmenso poder: protégeme.
Y en tus brazos al expirar: recíbeme.
Virgen del Carmen, ruega por nosotros.
Amén."

Gozos a la Virgen del Carmen

Prodigioso y admirable
Imán de nuestro desvelo;
Nubecilla del Carmelo,
Sednos protectora y Madre.
Salve, Reina de los, cielos,
De misericordia Madre,
Vida y dulzura divina;
Esperanza nuestra, Salve;
Nubecilla etc.
Dios te Salve, Templo hermoso
Del divino Verbo en carne,
Sálvate Dios, Madre Virgen,
Pues eres Virgen y Madre;
Nubecilla etc.
Volvednos, Madre piadosa,
Vuestros ojos admirables,
Y mirad por vuestros hijos,
Pues que sois piadosa Madre;
Nubecilla etc.
Socorrednos, pues escucha
Que en las penas y combates
A ti suspiramos todos
En este lloroso valle;
Nubecilla etc.
Mostradnos a vuestro Hijo
De Josafat en el Valle,
Piadoso, pues que nació
De ese cristal admirable;
Nubecilla etc.
Rogad por vuestros devotos
A la bondad inefable;
Pues murió para salvarnos,
Por su clemencia nos salve;
Nubecilla del Carmelo,
Sednos protectora y Madre.
V. Ruega por nos, santa Madre de Dios.
R. Para que seamos dignos de las promesas de Jesucristo.

ORACIÓN
Oh Dios, que adornaste a la Orden de la Beatísima siempre Virgen y Madre tuya María con el singular título del Carmelo: concede propicio que escudados con los auxilios de aquella cuya conmemoración celebramos, seamos dignos de llegar a los gozos eternos. Tu que vives y reinas por los siglos de los siglos. Así sea.

Concluir cada día con tres avemarías

Oración a Nuestra Señora de Itatí

Tiernísima Madre de Dios y de los hombres que,
bajo la advocación de la pura y limpia
Concepción de nuestra Señora de Itatí
miraste con ojos de misericordia
por más de cuatro siglos
a todos los que te han implorado,
no deseches ahora las súplica de éste tu hijo,
que humildemente recurre a ti.

Atiende mis necesidades,
que tú mejor que yo las conoces.

Y, sobre todo Madre mía,
concédeme un gran amor a tu divino Hijo Jesús,
y un corazón puro, humilde y prudente,
paciencia en la vida,
fortaleza en las tentaciones
y consuelo en la muerte.
Amén.

**************************
Madre y Señora, Virgen de Itatí. Mas que nadie conoces nuestras miserias y necesidades, sabemos que hay mucho que hacer, y cada uno tiene su propia tarea, en este tiempo, nuestro tiempo.

Madre Santísima, intercede para que nosotros recibamos la fuerza necesaria para cooperar con la gran tarea de cambiar este mundo nuestro, poniendo todos un grano de arena.

"¡Mujer, ahí tienes a tu hijo!"

Con estas palabras Al encomendarte a Juan el Apóstol, y con él, a todos los hijos de la Iglesia, estamos aquí, reunidos en torno a ti, pues queremos contarte Señora, que aquí vibra el entusiasmo de los jóvenes, aquí se ha elevado la súplica de los enfermos, por aquí han pasado sacerdotes y religiosos, artistas y periodistas, hombres del trabajo y de la ciencia, niños y adultos, y nos permitimos en nombre de todos ellos, buscar amparo bajo tu materna protección e implorar confiados tu intercesión ante los desafíos ocultos del futuro.

Junto a estas ofrendas Madre, te encomendamos a todos los hombres, comenzando por los más débiles: a los niños que aún no han visto la luz y a los que han nacido en medio de la pobreza y el sufrimiento; a los jóvenes en busca de un futuro a las personas que no tienen trabajo, a las que padecen hambre o enfermedad. Te encomendamos a las familias rotas, a los ancianos que carecen de asistencia y aquellos que están solos.

Madre nuestra, Tú que conoces los sufrimientos y las esperanzas, ayuda a tus hijos en las pruebas cotidianas que la vida reserva a cada uno y haz que, con el esfuerzo de todos, las tinieblas no prevalezcan sobre la luz, luz del mundo, la de tu Hijo Jesús único Salvador, que reina con el Padre y el Espíritu Santo por los siglos de los siglos.
Amén.


Conoce su historia en el siguiente enlace

Oración del soldado Peruano

(Para rezar por la tarde)
¡Señor!,
ha terminado una jornada más en el camino de mi vida.
Este trozo de tiempo he procurado hacerlo,
con los ojos y el corazón fijos en Ti
y en el pabellón bendito de mi Patria.
¡Señor!, si algo bueno he hecho,
te suplico que lo escribas en el haber del Libro de la Vida,
y si por mi fragilidad humana hice algo malo,
se pierda en el abismo de tu gran misericordia.
Que en esta noche, Señor,
mis fuerzas encuentren un descanso reparador,
y mi espíritu no se aniquile con el pecado.
Que tus ángeles vigilen mi sueño.
¡Madre de la Merced!, que tu manto inmaculado
cubra y proteja a nuestro querido Pabellón Nacional
y a todos sus fieles servidores.
Amén.

Saludo a la Santísima Trinidad

Santísima Trinidad Padre, Hijo y Espíritu Santo. Buenos días.
Buenos días Dios Padre creador y dueño de mi vida.
Buenos días Jesucristo, mi Dios y mi Redentor.
Buenos días Espíritu Santo, mi Dios y mi amigo.
Buenos días Santa María y todos los amigos de Dios.
Buenos días hermanos y hermanas (de Radio María).
Hoy vamos a pasar un día bello con Dios y los hermanos.
Bendita la luz del día que también hoy salió, como un beso de Dios, a cada uno de sus hijos.
Bendita la tierra que el Señor nos dio para que vivamos en ella y la cuidemos y la mejoremos.
Benditos los hombres y mujeres que hoy saldrán a buscar el pan del día para ellos y su familia.
Benditos mis hermanos que sufren y con su dolor fortalecen el cuerpo místico de Cristo.
Buenos días a todos. Y que la bendición de Dios todopoderoso, padre, Hijo y Espíritu Santo descienda sobre cada uno de ustedes y los acompañe.
Amén.

Madre del Redentor


Madre del Redentor, virgen fecunda, 
puerta del cielo, siempre abierta, 
estrella del mar, 

ven a librar al pueblo que tropieza 
y se quiere levantar. 

Ante la admiración de cielo y tierra, 
engendraste a tu santo Creador, 
y permaneces siempre virgen. 

Recibe el saludo del ángel Gabriel, 
y ten piedad de nosotros, pecadores.

Oración de la consagración de las familias de todo el mundo al Sagrado Corazón de Jesús (realizada el 3 de Junio de 2007 en Barcelona (España) por el Cardenal De Giorgi)


Señor Jesucristo, Redentor del mundo,
Amigo de los sencillos y de los pecadores, 
que en la Cruz te has dejado traspasar
tu Corazón Sagrado 
para salvarnos del pecado
y darnos la abundancia de la gracia divina.
Mira compasivo nuestra debilidad, y ten piedad.
Libéranos del pecado y del mal, 
y condúcenos a la auténtica paz,
que se encuentra por la conversión 
y la acogida de tu Palabra.
Tú que nos invitas a seguirte
y a amarte como discípulos, 
porque así encontraremos el descanso 
y la felicidad que tanto deseamos,
no nos dejes nunca de tu mano poderosa,
y sostennos bondadoso en todos nuestros caminos.

Hoy consagramos humildemente a tu Corazón
nuestras vidas y nuestras familias,
y encomendamos a tu misericordia todas las familias del mundo.
porque queremos vivir siempre con la confianza puesta sólo en Ti, 
que eres el Amor infinito,
y porque te queremos servir de todo corazón a Ti y a nuestros hermanos por amor a Ti.
Haz, Señor, que todos podamos encontrar en Ti
el Amigo verdadero y el Maestro bondadoso y humilde,
y que en tu Corazón Sagrado aprendamos el amor generoso y sacrificado hacia todos.
Amén.

Consagración de la casa al Sagrado Corazón de Jesús

Sagrado Corazón de Jesús:

Nos hemos reunido aquí para ofrecerte nuestra casa.
Hoy, que te echan de tantos sitios, 
nosotros te recibimos encantados en nuestro hogar.
Queremos que vivas a nuestro lado;
que participes de nuestras alegrías y de nuestras penas. 
de nuestra riqueza y de nuestra pobreza, 
de nuestros triunfos y de nuestros fracasos.

Queremos que nos ilumines en nuestras dudas,
que nos adviertas en nuestros peligros, 
que nos ayudes en nuestras tentaciones,
que nos alientes en nuestros contratiempos, 
que nos orientes en nuestras resoluciones y, sobre todo, 
que nos enciendas en un gran amor a Ti, 
que nos lleve a servirte siempre con toda fidelidad.

Concédenos, Señor, que seamos cada día mejores cristianos,
que nuestra vida sea un auténtico testimonio de nuestra fe,
que aprendamos a verte en los demás,
que sepamos pedir perdón sinceramente de nuestros pecados
y, finalmente, que consigamos la gracia suprema de una santa muerte,
que nos reúna contigo, en la Gloria, a todos los que ahora nos amamos aquí.

Señor, no somos dignos de que entres en nuestra casa;
pero si fuiste a la del centurión, y entraste en la de Zaqueo, y viviste en la de María Magdalena, 
dígnate quedarte aquí, con nosotros, para siempre.

Nosotros vamos a procurar siempre en esta casa:
creer lo que Tú quieres que creamos, 
pensar lo que Tú quieres que pensemos,
leer lo que Tú quieres que leamos, 
hablar lo que Tú quieres que hablemos,
amar lo que Tú quieres que amemos, 
y hacer lo que Tú quieres que hagamos.

Que toda esta familia sea conforme siempre a tus deseos. 
Porque confiamos en Ti como en nuestro Padre.
Y no te hemos entronizado aquí para que presencies
nuestras rebeldías y pecados,
sino para que bendigas la buena voluntad que tenemos de servirte.
Ayúdanos con tu gracia, pues reconocemos nuestra debilidad.
Pero en Ti ponemos nuestra confianza.

Sagrado Corazón de Jesús, en TI confío (tres veces). 
Padrenuestro. Avemaría. Gloria. 

Nota: Se recomienda renovar esta consagración todos los años, a ser posible confesando y comulgando toda la familia.

Consagración diaria al Sagrado Corazón de Jesús
Amable Jesús mío, como testimonio de mi agradecimiento y en reparación de mis infidelidades, yo N… te doy mi corazón; me consagro enteramente a ti y propongo con tu gracia no ofenderte ya más.

Consagración de la Familia al Sagrado Corazón de Jesús

Santísimo Amor de Jesús,
te consagramos nuestros corazones,
nuestras vidas, y nuestras familias.
Conocemos que el ejemplo bello de Tu hogar en Nazaret,
fue un modelo para cada una de nuestras familias.
Esperamos obtener con Tu ayuda,
la unión y el amor fuerte y perdurable que recibiste. 
- Que nuestro hogar se llene de gozo. 
- Que el afecto sincero, la paciencia, la tolerancia
y el respeto mutuo, estén siempre presentes. 
- Que nuestras oraciones incluyan las necesidades de los otros, no sólo las nuestras.
- Que siempre estemos cerca de los Sacramentos.
- Que la paz esté con nosotros,
y cuando vengan las dificultades danos consuelo y esperanza.
Bendice a todos los que aquí habitamos y también a los difuntos
Mantén nuestras familias cerca de tu Amor
y que Tu protección esté siempre con nosotros.
Amén.

Oración por la Santificación de los Sacerdotes

Señor Jesús
que has suplicado por tus mismos discípulos,
escucha ahora las súplicas de tu iglesia,
por la que has dado la vida.
Concédenos sacerdotes a tu imagen,
que sepan también orar, interceder,
compadecerse y perseverar en la cruz,
para que el mundo vea que tu presencia
continúa entre nosotros.
Te lo pedimos en nombre
también de tu Madre,
que en la cruz se volvió madre Sacerdotal,
puesto que supo interceder
por todos los hombres.
Amén.

Consagración de los jóvenes al Sagrado Corazón de Jesús

(Por Benedicto XVI, JMJ 2011)

«Señor Jesucristo,
Hermano, Amigo y Redentor del hombre,
mira con amor a los jóvenes aquí reunidos
y abre para ellos la fuente eterna de tu misericordia
que mana de tu Corazón abierto en la Cruz.
Dóciles a tu llamada,
han venido para estar contigo y adorarte.

Con ardiente plegaria los consagro a tu Corazón
para que, arraigados y edificados en ti,
sean siempre tuyos, en la vida y en la muerte.
¡Que jamás se aparten de ti!
Otórgales un corazón semejante al tuyo,
manso y humilde,
para que escuchen siempre tu voz y tus mandatos,
cumplan tu voluntad y sean en medio del mundo
alabanza de tu gloria, de modo que los hombres,
contemplando sus obras, den gloria al Padre
con quien vives, feliz para siempre,
en la unidad del Espíritu Santo
por los siglos de los siglos».

Oración del Soldado Peruano

(Para rezar por la mañana)

Señor,
ha llegado un nuevo día y un día más para mi vida,
los que considero como dones tuyos y te lo agradezco de todo corazón.
Señor, ayúdame para que no quebrante tu santa ley,
ni mis consignas y reglamentos militares.
Que durante esta jornada muchas veces me acuerde de Ti,
que sea sumiso a mis superiores,
amable con mis camaradas, esclavo de mi deber.
Dame tu gracia y tu bendición
para que este día signifique en mi vida
una ocasión de perfección y de progreso.
Nuestra Señora de la Merced,
Patrona de las Armas de mi Patria,
que aceptaste ser Madre del Redentor del mundo,
ayúdanos a los que vestimos el uniforme de la Patria,
que fiel a nuestra misión,
seamos como el Perú lo necesita,
garantes de la seguridad y libertad de nuestros pueblos,
y heroicos defensores de la Patria.
Amén.